[dropcap]U[/dropcap]na labor totalmente desinteresada es la que cumple un grupo de profesores, monitores y padres que son parte de la escuela de fútbol del sector norponiente de nuestra ciudad Lomas de Manso – Bella Esperanza, trabajando en un sector con grandes índices de riesgo social por lo que esta actividad se acrecienta aún más tratando de generar espacios para que los niños y jóvenes no caigan en el flagelo de las drogas, el alcoholismo y la delincuencia que tanto afectan en la actualidad a la sociedad.
La escuela de fútbol hoy en día está a cargo del profesor Claudio “Kotto” Martínez Durán, apoyado por los monitores Marcelo Quintanilla, Mario Isla y Franco Bustos, quienes se dan la tarea de trabajar con más de 100 alumnos con series que van desde los cuatro hasta los 16 años. Bajo el importante amparo del club Bella Esperanza hacen de local en la cancha Luis González Quintanilla que está ubicada en el sector de Esmeralda.
Habla su directiva
Sobre este cuarto aniversario se refirió la presidenta de la escuela de fútbol, Alejandra Galleguillos, quien señaló sobre su labor al frente de la institución que es “un trabajo satisfactorio, los niños la pasan bien, nosotros como familia nos unimos más y los niños tienen algo en que divertirse sanamente”.
Respecto a si se imaginaba, luego de cuatro años, que la institución que preside estaría en este sitial planteó que “yo creo que sí porque la gente que apoyó desde un principio y está apoyando ahora tiene ganas que los chiquillos salgan adelante, tienen ganas que tengan algo en que ocupar su tiempo, en algo sano y divertirse más que nada, pasarla bien, hacer amigos, hacer familia”.
Por su parte la secretaria de la escuela de fútbol, Alejandra Serra, en torno a lo que ha significado la institución manifestó que “ha sido grato, satisfactorio, hemos tenido hartos logros con los niños. Su felicidad es la mayor felicidad mía y de todos los papás”.
Sobre su trabajo como secretaria dijo que es “una labor dura y, por supuesto, que voy a seguir trabajando con ellos y con todo el grupo de apoderados que somos”.
Finalmente habló la tesorera de la institución, Angélica Sánchez, manifestando que “nosotros hemos trabajado arduamente para sacar a flote esta escuela. El único aporte que estamos teniendo por el minuto es de nosotros mismos los apoderados y, obviamente, del club Bella Esperanza que en este caso son prácticamente nuestros padrinos. Tenemos un buen grupo trabajando, esforzados y están muy bien afiatados. Hemos tenido muchos logros pero todos a puro pulmón como se dice”.
Respecto a la cantidad de niños que están incorporados a la institución señaló que “aproximadamente son como 100 niños, si es que no dejo algunos afuera porque nuevamente estamos reclutando más niños y no solamente acá de las Lomas de Manso ya que tenemos de distintos lugares”.
En torno a si espera seguir el crecimiento de la escuela de fútbol agregó que “por supuesto que sí, de hecho ya la labor de trabajar con niños es siempre proyectarse a futuro, verlos crecer y que se realicen como personas”.
“Ha sido un crecimiento super importante tanto para mí como para mi hijo, así como para los niños y los demás que son integrantes del escuela y pasan a ser como un hijo más, sus logros son nuestros logros”, sentenció sobre sus cuatro años integrada de lleno con la institución.
Agradecimientos
Finalmente hay que mencionar y poner especial énfasis en la ayuda desinteresada y sin muchos aspavientos que entregan a la institución algunos empresarios locales como: Manzanita, Keno’s Bar, Bajón Tropical, Ópticas Rotter & Krauss, Club M y Constructora Río Poniente, quienes desinteresadamente realizan su labor de apoyo social la cual es muy significativa y digna de ser destacada.