Sobre como sucedió esta penosa situación Trejos indicó que “el encuentro no tuvo ningún problema, nada. En los instantes en que termino el partido viene un jugador ofuscado, me saca la madre, a lo cual yo le muestro la tarjeta roja y se me abalanza y me tira un cabezazo”.
“Me fracturó un diente, me rompió el labio, y caí casi aturdido al suelo. En la Liga tienen ambulancias y paramédicos, me atendieron ahí, me evaluaron y me mandaron al hospital”, relató el pito melipillano que nunca en toda su carrera dirigiendo había sufrido alguna agresión física.
Respecto a cómo actuaron los responsables de la Liga y sus colegas, “Carlitos” Trejos manifestó que “allá en la Liga me apoyaron todos porque en más de 10 años nunca había pasado esto, además de los colegas que son de allá de Santiago”.
Ahora dependiendo del resultado de las radiografías se verá el curso a seguir para que este tipo de violentos e indeseables personajes, en lo posible, no vuelva a pisar un campo deportivo por un largo período de tiempo, además de las acciones penales que se le responsabilicen.
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