La pesadilla de Pumas FC en la Tercera División B llegó a su fin. Y aunque pese al descenso consumado el equipo continuó compitiendo con valentía y orgullo deportivo frente a la adversidad, la derrota ante San Bernardo Unido selló una campaña desastrosa en la que el conjunto felino acumuló 20 derrotas y solo logró 2 empates, sin alcanzar ninguna victoria a lo largo de las 22 fechas del campeonato. Además, la defensa del equipo fue muy permeable, recibiendo la asombrosa cantidad de 100 goles en contra, mientras que en ofensiva solo lograron anotar 6 tantos en todo el torneo.
Esta desafortunada actuación colocó a Pumas FC en el último puesto de la clasificación, lo que -como se mencionó previamente- significó la pérdida de categoría y la necesidad de esperar al menos un año antes de tener la oportunidad de reintegrarse a la Tercera División B. Para los jugadores, aficionados del equipo y, también, la comunidad deportiva de Melipilla, este ha sido un año difícil de olvidar.
Ahora, Pumas FC enfrenta el desafío de reestructurar su equipo y regresar con más fuerza en futuras temporadas. La lección de esta campaña difícil seguramente servirá como motivación para volver a competir en el fútbol de Tercera División B con determinación y espíritu renovado.