En 1936 Magallanes (en la foto) era el campeón vigente y tras intensas tratativas la Liga de Fútbol de Melipilla logró concertar un partido ante los albicelestes, siendo un suceso de enorme trascendencia para nuestra ciudad en aquellos años.
Era tanta la superioridad que, en el papel, se decía que había entre el monarca del fútbol chileno y la selección melipillana que incluso, los mismos dirigentes locales apostaban a un triunfo magallánico, holgado, unos por 3-1 y otros por 5-0, dejando en claro por qué eran los mejores del país.
La siguiente es la crónica de aquella gloriosa tarde dominical del 12 de julio de 1936 donde los de Magallanes no contaban que frente a ellos estaba uno de los equipos de Melipilla que hizo historia y que el paso del tiempo pareció olvidar.
Nunca la cancha de El Llano se había visto como la tarde del domingo, por tratarse de la presentación de los campeones profesionales de Santiago, los académicos del Magallanes, quienes jugaron contra la selección de esta ciudad. Este mismo público se entregó a una apoteosis de alegría al término del partido que ganaron los locales y que durante todo el juego alentó a los representantes de los colores locales.
Magallanes – Melipilla
La aparición en la cancha de los campeones profesionales fue saludada con una estruendosa ovación de la concurrencia. La escuadra campeona lucía en sus hombros la gallardía conocida y los aficionados repetían y apuntaban con su mano a los más conocidos jugadores.
Cuando aparecieron los defensores del deporte local, fueron alentados y saludados con los aplausos de simpatías de todos los asistentes.
Bajo las órdenes del árbitro oficial Sr. Julio Retamales, los equipos se alinearon en la cancha de la siguiente manera:
Magallanes: Soto, Riveros, Carmona, Ponce, Morales, Córdova, Flores, Ogaz, Avendaño, Farfán y Navarro.
Melipilla: Carreño, Vargas, Romero, González, Gómez, Pozo, Carreño, Romanini, Díaz, Oltremari y Miranda.
¡Goal de Melipilla!
Lo más trascendente del partido fue sin duda la obtención del primer goal a favor de los colores locales. Romanini recibe continuos pases de sus compañeros de línea,a quienes prestaban una ayuda tesonera y eficaz los hombres de la línea media. En una de estas, el “Cheche” Romanini se “destapa” con un tiro de distancia que Soto alcanza solo a ver pasar. Gritos, saltos y alegría desbordante hubo a raíz de esta ventaja de Melipilla, terminando la primera etapa favorable a los nuestros por un tanto a 0 de Magallanes.
Empate
Iniciado nuevamente el juego, a los pocos momentos se produce el empate académico con tiro sorpresivo de Morales.
Nueva ventaja de Magallanes
Pero no obstante sus esfuerzos los visitantes se sitúan en el campo de los Cuatro Diablos y logran por intermedio de Avendaño aventajar a los nuestros.
Otro goal del Cheche
Siendo Melipilla quien tuvo la felicidad de iniciar la cuenta, sus jugadores actuaban en forma muy entusiasta. Y es así como Romanini nuevamente se encuentra con la pelota en sus pies (se la había puesto Carreño) y como se gasta una patada de mula, envía sin tardanza otro feroz taponazo que deja sin chance a Soto, esto se produce cuando habían transcurrido 25 minutos del segundo tiempo.
Con esto los contendores quedan en igualdad de posiciones y nuevamente un ataque local sitúa la esférica en el área de Magallanes y cuando un back se disponía rechazarla toca la pelota con la mano.
¡Penal!
Esta fue la exclamación que surgió inmediatamente de boca de todos los aficionados. El árbitro cobra la falta, habiéndola visto, y es designado el delantero Carreño para servirla. Lo hace con un tiro violento y a un ángulo que Soto es incapaz de barajar. Poco después terminaba el partido y se arremolinan alrededor de los jugadores todos los que deseaban hacerlos objetos de las manifestaciones y simpatías y felicitaciones por el magnífico triunfo alcanzado.
Ahora a raíz de este tremendo triunfo conseguido por los representantes dignos del fútbol local, justo es que se realice en su homenaje una manifestación de agasajo, pues hemos visto por ahí muy buenas disposiciones con este objeto.
Los mejores hombres
Sin quitar mérito a todos los defensores del baluarte de los “Cuatro Diablos” podemos señalar aquí a los jugadores que más se distinguieron en este partido.
Son ellos, en primer lugar, el Cheche Romanini, que con sus certeros tiros perforó dos veces la valla académica. Después viene Romero que en la defensa se constituyó una muralla infranqueable. También González alcanzó con su actuación los honores de este aparte. Y los demás, nuestras felicitaciones en conjunto.
La concurrencia
En las tribunas anotamos la presencia de distinguidas personalidades, entre ellos el Alcalde subrogante Don Roberto Bravo, el Capitán Sr. Luis León Mengolar, Don Fernando Larraín y numerosas familias de la localidad.
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